Hace menos de dos semanas, comentaba por este mismo blog, lo mucho que me estaba gustando The Messenger. Y hoy lo he terminado y debo de decir que es un JUEGAZO con mayúsculas. Es un juego que tira de nostalgia con esos gráficos que van cambiando entre 8 y 16 bits (tiene su explicación). Además tiene una duración más que considerable (si eres torpe como yo, unas 20h) y una dificultad muy bien ajustada.
NO VOY A SOLTAR SPOILER, AUNQUE SÍ DEJARÉ ALGÚN COMENTARIO
En The Messenger tomamos el papel de un ninja al que se le ha encomendado la misión de llevar un pergamino a lo más alto de la más alta torre para salvar el mundo. Durante estas primeras horas, The Messenger es un juego que recuerda a títulos como Ninja Gaiden, al más puro estilo 8 bits.
 |
| Estilo 8 bits, cuando estamos en el pasado (o mejor dicho, "el presente") |
A las 3 horas de juego sucede una de las cosas más rocambolescas y que menos te esperas que ocurra en el desarrollo. Parece que el juego va a llegar a su fin, ... pero no. Para terminar con todo mal debemos de destruir la maldición desde dentro y para ello deberemos reunir una serie de notas musicales repartidas por todos los mapas.
 |
| Para poder llegar al final del juego deberemos reunir las 8 notas musicales |
Tendremos que ir buscando a través de pistas que nos iran dando estas notas musicales. Para avanzar, a veces tendremos que ir dando saltos en el tiempo a través de portales interdimensionales. Cuando saltamos del modo 8 bits al modo 16 bits estamos realmente viajando en el tiempo.
 |
| Modo 16 bits, estamos en el futuro |
Uno de los aspectos mejor resueltos en The Messenger es el control del personaje. Es ágil y preciso; rara vez nos caeremos por culpa del programa (aunque siempre podemos culpar a los programadores). Las melodías son muy buenas y está tan cuidado que incluso para cada mapa tendremos una en modo 8 bits y otra en modo 16bits (o más bits, no los he contado).
Si a día de hoy tuviera que recomendar un juego, The Messenger sería el elegido. Es una pena que para muchos vaya a pasar desapercibido por no ser un AAA. O que Celeste se llevara el premio a indie del año cuando The Messenger, desde mi punto de vista, es MUY SUPERIOR.
Mención especial se merece El Tendero. El tendero es un personaje con el que te tienes que reir en algún momento. Los dialogos con nuestro personaje son a menudo para echarse unas risas. Tiene puntos como el misterioso armario, sus historias sin moraleja, el sumidero de dinero o la gramola en la tienda.
The Messenger es un juego al que volveré en unos meses, cuando reciba la edición física que he reservado para PlayStation 4 (no está para XBOX ni PC, así que PS4 era mi tercera opción).
 |
| El diseño de la caratula no es definitivo |
Y nada más, al final no he spoileado nada y tal vez me haya repetido respecto a la anterior entrada sobre el juego; pero por no perder la costumbre, tenía que dejar la entrada de "Juego Terminado" y de paso, aprovechar para volver a recomendar a todo el mundo, uno de los mejores juegos de los últimos años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario